sábado, 15 de octubre de 2011

EL OLVIDO//**//aunque no me acuerde de olvidarte**

Jenny G.//**//




Me gusta como suenas... cómo te escribes, me gusta oirte y buscarte cuando siento la necesidad de olvidar... lo que me duele, lo que me irrita, lo que me hace llorar o sufrir o simplemente lo que no me interesa... ahí corro a buscarte con fuerza, con ímpetu, para que resetees todo lo que no quiero recordar pero no sÓlo de mi cabeza no, sino de mi pequeño motor ahí está la auténtica memoria, la que duele, la que jode,... pero el olvido en sí es una mentira... porque no existe cuando lo buscamos, cuando lo forzamos, cuando lo pensamos cada instante para que llegue, él siempre viene sólo, sin avisar, aparece de repente como aparece un náufrago en una isla desierta, como el frío de otoño, como una pequeña barca a la deriva.... el olvido aparece cuando nos olvidamos de olvidar..







Isabel V//**//



No lo podía creer, aquel señor me seguía la corriente como si todo estuviese previamente estipulado. Yo no recordaba cómo ni por qué había llegado medio desnuda en plena calle, pero gracias a sus mentiras no tuve que justificarme. "Sí, llevamos más de treinta años casados", le decía al señor agente. Cuando me soltaron, aun a riesgo de abusar de la espontánea generosidad de ese desconocido, le pregunté si podía dejarme algo de ropa. Tuvo que darle mucha pena verme tan desamparada, porque no sólo accedió, sino que puso a mi disposición un armario repleto de prendas. Y todo era de mi talla.
Adaptación microrelato J.A. Plaza







Laura F. //**//

 


No sé en qué momento comprendí que ya no quedaba ningún tipo de esperanza. Que todo se había quedado reducido a un montón de escombros. Mi capacidad visionaria de la vida tan sólo es una sombra. Yo, tan preponderante, tan real, tan dura. Todo acabó. Quizás podía llegar a pensar que algún día ocurriría. Pero no, no fue ésto lo que pensé que sucedería. Espectacular y llena de luces, repleta de gente, esplendorosa, vaporosa, así me veía yo. Qué mentira más grande la que me esperaba a la vuelta. ¡Qué trozos de tristeza tenían que pasar por encima de mi! Hecha triza y a pedazos, cayendo y atrayendo hacia mí lo más oscuro del Universo... EL OLVIDO.




No hay comentarios:

Publicar un comentario